Mar del Plata.- Desde hace algunos años y con paso sostenido, el Festival de Cine de Mar del Plata intenta convertirse en plataforma de difusión del mejor cine de la región, tendencia reafirmada en 2007 con la creación de una competencia latinoamericana, paralela a la competencia internacional por los premios Astor.
Este año, los programadores del único festival clase A de América Latina (categoría que otorga la Federación Internacional de Asociaciones de Productores, FIAPF) decidieron además incluir un "Panorama del Cine Latinoamericano" con mayoría de películas de México y Brasil pero también de otros con una tradición cinematográfica mucho menor como República Dominicana o Guatemala.
De México se podrán ver cinco títulos, seis si se incluye la coproducción brasileña-mexicana "Super nada", de Rubens Rewald. Se trata de "Chalán", el thriller político de Jorge Michel Grau sobre el asistente de un diputado federal, maltratado por éste; "El fantástico mundo de Juan Orol", de Sebastián del Amo, biopic de quien para muchos fue el "Ed Wood del cine mexicano" y "Fecha de caducidad", de Kenya Márquez, ganadora del Premio Especial del Jurado en el Festival de Moscú.
Además se exhiben dentro de esta sección "El lenguaje de los machetes", de Kyzza Terrazas, quien fuera el guionista del debut como director de Gael García Bernal, "Déficit"; y "El sueño de Lú", de Hari Sama, historia del duelo de una madre ante la pérdida de su hijo.
A ellas se suman las películas en competencia latinoamericana, "Aquí y allá", de Antonio Méndez Esparza, "Después de Lucía", de Michel Franco -quien ya estuvo en Mar del Plata en 2009 con "Daniel y Ana"- y "Post Tenebras Lux", de Carlos Reygadas, Palma de Oro al mejor director este año en el Festival de Cannes, reafirmando también el interés del certamen por el cine mexicano.
El segundo país con mayor representación dentro del panorama latinoamericano es Brasil (que junto a México y Argentina conforma el tríptico de mayor tradición cinematográfica en la región) con "A música segundo Tom Jobim", de Nelson Pereira dos Santos y Dora Jobim, nieta de Tom, acerca de una de las figuras clave de la bossa nova; "Sudoeste", ópera prima de Eduardo Nunes y "Super Nada". También "Os últimos cangaceiros", de Wolney Oliveira, sobre una pareja que integró una de las bandas que asolaron el nordeste brasileño hasta bien entrado el siglo XX y "Una longa viagem", de Lucia Murat.
De Colombia se exhiben "Chocó", de Jhonny Hendrix, la coproducción colombo-argentina "El páramo", de Jaime Osorio Márquez y el cortometraje "Júbilo inmortal", de Luis Felipe Moncada Ruiz, mientras que de la vecina Venezuela llega "Brecha en el silencio", de Luis y Andrés Rodríguez y de Chile el mediometraje "Marker 72", de Miguel Ángel Vidaurre, homenaje al famoso documentalista francés Chris Marker, quien murió en julio de este año.
Entre los hallazgos de la sección (por lo poco frecuente que es toparse con películas de estas latitudes en los festivales) figuran la dominicana "La lucha de Ana", ópera prima de Bladimir Abud, que aborda la marginalidad en los barrios más pobres de Santo Domingo; y la guatemalteca "TRIP La Película", del actor y director de teatro Fran Lepe, que llevó al cine el monólogo teatral en el que abordaba su relación con las drogas, "Delirium Tremens".
Este año, los programadores del único festival clase A de América Latina (categoría que otorga la Federación Internacional de Asociaciones de Productores, FIAPF) decidieron además incluir un "Panorama del Cine Latinoamericano" con mayoría de películas de México y Brasil pero también de otros con una tradición cinematográfica mucho menor como República Dominicana o Guatemala.
De México se podrán ver cinco títulos, seis si se incluye la coproducción brasileña-mexicana "Super nada", de Rubens Rewald. Se trata de "Chalán", el thriller político de Jorge Michel Grau sobre el asistente de un diputado federal, maltratado por éste; "El fantástico mundo de Juan Orol", de Sebastián del Amo, biopic de quien para muchos fue el "Ed Wood del cine mexicano" y "Fecha de caducidad", de Kenya Márquez, ganadora del Premio Especial del Jurado en el Festival de Moscú.
Además se exhiben dentro de esta sección "El lenguaje de los machetes", de Kyzza Terrazas, quien fuera el guionista del debut como director de Gael García Bernal, "Déficit"; y "El sueño de Lú", de Hari Sama, historia del duelo de una madre ante la pérdida de su hijo.
A ellas se suman las películas en competencia latinoamericana, "Aquí y allá", de Antonio Méndez Esparza, "Después de Lucía", de Michel Franco -quien ya estuvo en Mar del Plata en 2009 con "Daniel y Ana"- y "Post Tenebras Lux", de Carlos Reygadas, Palma de Oro al mejor director este año en el Festival de Cannes, reafirmando también el interés del certamen por el cine mexicano.
El segundo país con mayor representación dentro del panorama latinoamericano es Brasil (que junto a México y Argentina conforma el tríptico de mayor tradición cinematográfica en la región) con "A música segundo Tom Jobim", de Nelson Pereira dos Santos y Dora Jobim, nieta de Tom, acerca de una de las figuras clave de la bossa nova; "Sudoeste", ópera prima de Eduardo Nunes y "Super Nada". También "Os últimos cangaceiros", de Wolney Oliveira, sobre una pareja que integró una de las bandas que asolaron el nordeste brasileño hasta bien entrado el siglo XX y "Una longa viagem", de Lucia Murat.
De Colombia se exhiben "Chocó", de Jhonny Hendrix, la coproducción colombo-argentina "El páramo", de Jaime Osorio Márquez y el cortometraje "Júbilo inmortal", de Luis Felipe Moncada Ruiz, mientras que de la vecina Venezuela llega "Brecha en el silencio", de Luis y Andrés Rodríguez y de Chile el mediometraje "Marker 72", de Miguel Ángel Vidaurre, homenaje al famoso documentalista francés Chris Marker, quien murió en julio de este año.
Entre los hallazgos de la sección (por lo poco frecuente que es toparse con películas de estas latitudes en los festivales) figuran la dominicana "La lucha de Ana", ópera prima de Bladimir Abud, que aborda la marginalidad en los barrios más pobres de Santo Domingo; y la guatemalteca "TRIP La Película", del actor y director de teatro Fran Lepe, que llevó al cine el monólogo teatral en el que abordaba su relación con las drogas, "Delirium Tremens".